Cuando hay una artrosis en la rodilla o un desgaste en la superficie articular va habiendo una pérdida de cartílago y de todos los mecanismos que nos ayudan dentro de la articulación para tener un buen soporte, esto provoca un intenso dolor.
La cirugía de reemplazo articular como su nombre lo indica, nos permite reemplazar por completo la articulación que se encuentra dañada. La intervención consiste en cortes milimétricos de 5mm a 8mm, esto va a depender del grado de desgaste del paciente.
Se hace una configuración en el femur, en la tibia y también en la rótula. Una vez configurada la articulación se utiliza un cemento especial medicado que nos ayuda a tener una protección de aproximadamente de 41 días de antibioticoterapia.
Una vez reemplazada la superficie articular se coloca un polietileno de ultra alta densidad que nos ayuda a asemejar los meniscos y el ligamento cruzado anterior. Finalmente, la patela, que es la que nos provoca sobre todo, el dolor al subir y bajar escaleras se reemplaza por completo, y el resultado será una articulación que se podría a asemejar a una persona de 15 años.
Este tipo de cirugía deberá ser empatada con una buena rehabilitación para obtener un mejor resultado.